
Concurso Albañil Mexicano
El objetivo de este concurso fue visibilizar la labor conjunta del albañil con el arquitecto, se propone una secuencia análoga de diferentes procesos de obra en la que se retrata el sentimentalismo inerte de la construcción.
Con manos de fuego y callos de piedra,
el albañil erige el sueño del plano.
Pone vida en muros, alma en ladrillos,
transforma la idea en sólido espacio.
El arquitecto sueña, pero el albañil construye,
teje con mortero lo que el diseño inspira,
y en cada capa, en cada trazo firme,
nace el alma que el edificio respira.
Oda en homenaje a Don Cruz


